lunes, agosto 21, 2006

Buenos Vientos

El whisky amansa la sangre. Y los borbotones suicidas en el cerebro deciden deformarse y correr libres hacia los pies. Para llegar. Para conocer mundo de caminante.
A veces es bueno sentirse solo cuando mucho más que cien cabezas me rodean la existencia. Solo. Alejado del suelo.
Y los ojos wide open para aprender a ver.

Y es entonces que las luces se deforman y crecen y mutan en seres flotantes; dibujan espíritus sobre el mar mientras el sr. whisky decide descender y que el cuerpo aguante la embestida. Que para eso está.

Cruzo. De Barkir a Buenos Vientos. Ciudad. Y el nombre que calza perfecto mientras el collar de luces se extiende como horizonte.
Entonces el cielo y el agua deciden divorciarse de luz, luces intermitentes y brillos agudos. Y así está bien. Da la bienvenida.

Comments on ""

 

Blogger Lety Ricardez said ... (10:58 a. m.) : 

Dice bien, a veces hace bien sentirse sólo, para estar consigo mismo, pero no tanto tiempo que el camino de regreso se borre de la memoria, porque aquellos otros están, siguen ahí mismo a la espera, y la misión debe continuar.

Saludos amigo mío

 

Blogger Jean Georges said ... (3:06 a. m.) : 

Lety: supe volver, porque tantos Hansel me sembraron el camino de migas y yo que andaba de goloso. Gracias por las tortas y el café de la tarde.

 

Anonymous Anónimo said ... (1:35 p. m.) : 

¿Fue Bogard quien afirmaba que la humanidad está dos copas por debajo del nivel de felicidad? De no haber sido él, tu prosa urbana así lo refrenda.

Saludos...

 

Blogger Jean Georges said ... (2:22 p. m.) : 

Angel: linda frase, aunque desconozco a ese señor. Conozco sí a Godard o a Bogart, pero supongo que si este ser es una mezcla de ambos, pagaría mi vida por ver sus películas.
Gracias Angel por la pasada.

 

post a comment
No te tomes la vida en serio, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella.